Las comunidades de lectores online un fenómeno en vías de expansión

La mayor parte del presupuesto que dedican actualmente los editores a sus campañas de marketing se destina en muchas ocasiones a crear comunidades de lectores online. Jane Tappuni en un artículo publicado en Publishing Perspectives, en el que analiza si verdaderamente les resulta tan rentable a las editoriales invertir en una plataforma online propia hace notar que ya hay muchos editores están convencidos de que este tipo de comunidades son esenciales.

La mayor parte del presupuesto que dedican actualmente los editores a sus campañas de marketing se destina en muchas ocasiones a crear comunidades de lectores online. Jane Tappuni en un artículo publicado en Publishing Perspectives, en el que analiza si verdaderamente les resulta tan rentable a las editoriales invertir en una plataforma online propia hace notar que ya hay muchos editores están convencidos de que este tipo de comunidades son esenciales.

Antes, el marketing de los grupos editoriales se centraba principalmente en las bibliotecas y las librerías. Pero en esa búsqueda de mantener un contacto directo con los lectores, la creación de plataformas online propias está en la mente de todos.

Los editores están convencidos de que este tipo de comunidades son esenciales, según un estudio realizado por Bowker Market Researche. Así por ejemplo, se prevé que el número de plataformas creadas por los grupos editoriales se duplique en los próximos dos años. La investigación, que se realizó entre editores estadounidenses y británicos, muestra que dos de cada tres ya poseen una plataforma online de lectores propia y se espera que en los dos próximos años aumente más de un noventa por ciento.

Muchas de estas redes sociales de lectura se centran en torno a un género o a un interés en particular que atraiga a un público objetivo concreto. De esos editores que habían creado la suya propia, comenta Tappuni, un sesenta y cuatro por ciento está convencido de que su inversión en el mercado ya está dando sus frutos y seguirá haciéndolo al ser una vía de marketing estupenda para aumentar las ventas de libros. Con estas expectativas –añade la periodista– una cuarta parte de las editoriales esperan tener siete o más redes en funcionamiento en el 2015.

Aunque el estudio se centró en el Reino Unido y los Estados Unidos, esta tendencia también se observa en otros países. En China, por ejemplo, se lanzó Cloudary en 2008. Esta comunidad, que se creó en torno a lectores y escritores, es un espacio online en el que cualquiera puede subir sus historias. En la actualidad cuenta con unos ochenta mil escritores.

Por tanto, finaliza Tappuni, el apoyo editorial para estas comunidades online, ya sean creadas por la misma editorial o por otros, es la línea que se está adoptando en ese esfuerzo por transformarse en esas organizaciones que dan la cara a los consumidores, y estos a su vez están dispuestos a formar parte de ello.
 


© Copyright Fundación Germán Sánchez Ruiperez, 2010