Lange sostiene que las actividades en los medios son importantes en el fomento de nuevas formas de alfabetización, lo que a su vez permite nuevas relaciones sociales y el mantenimiento de nuevas formas de participación cívica.
Hace tiempo participó en el proyecto The Digital Youth Project junto con un equipo de investigadores de la University of Southern California y la University of California y Berkeley, los cuales estaban interesados en estudiar el aprendizaje informal en entornos digitales.
El proyecto en un primer momento se centró en el concepto de “juventud digital” y según fue avanzando y llegó a su fin, estos investigadores pudieron comprobar que no todos los jóvenes digitales se crean por igual. A esto, Lange añadió su propio proyecto de los niños en Youtube, en el que también se quería demostrar la influencia directa de los antecedentes familiares en el interés de los niños por la tecnología y en las aspiraciones profesionales, pero sorprendió comprobar que no siempre es así.
El concepto de “nativos digitales”, es decir la idea de que todos los niños son igualmente versados en todas las tecnologías, no se pudo demostrar en el estudio de Lange. "Un hermano mayor puede estar más orientado técnicamente que su hermano pequeños” –señala la investigadora. Además, la antropóloga también pudo comprobar que algunos pequeños no compartían el entusiasmo de sus padres por las nuevas tecnologías, y en aquellas familias en las que los padres manifestaban su rotundo rechazo, los pequeños se acercaban con interés a la creación de vídeos.
En definitiva, la realización de este proyecto –explica Lange– puso de manifiesto la necesidad de mantener una mente abierta sobre cómo se está llevando a cabo una investigación y la de ser conscientes de que es preciso cuestionarse absolutamente todo y de que en cualquier momento habrá que dar un paso atrás durante la investigación.