Lily Alexander, profesora de cine, literatura y medios de comunicación en la Universidad de Nueva York, ha concedido una entrevista a Henry Jenkins en la que explica el concepto de viaje en la literatura de ficción actual y la empatía que puede despertar en la sociedad contemporánea.
El “Viaje del Héroe”, un termino acuñado por Joseph Campbell, es el punto de inicio que marca esta profesora para defender su exposición. El viaje siempre ha sido un símbolo de transformación, ajuste y crecimiento desde los más antiguos rituales. Su propósito era el de ayudar a los jóvenes en su transito hacia la madurez. Con el tiempo –continúa Alexander- esta narración ritual se ha extendido para englobar todas aquellas transformaciones y experiencias por las que pasa cualquier persona, independientemente de su edad o género.
El viaje –continúa- sigue siendo capaz de influir en las sociedades contemporáneas, pero lo hace a través de géneros como la acción, las aventuras, los cuentos de hadas, la fantasía, la ciencia ficción o más recientemente el realismo mágico.
En estos mundos de ficción, existen tres puntos que Alexander destaca en su enfoque hacia el paradigma del viaje: su valor de asombro, su capacidad transformadora y un conocimiento más profundo como meta de la historia. Pero además de estos viajes que suponen un esfuerzo y una recompensa final, esta profesora comenta como un gran número de lectores también se sienten atraídos por los viajes fallidos en los que el héroe o su autor comenten errores.
El publico de hoy en día ya está inmerso en ese tipo de viaje con un fin transformador, siente empatía por el nuevo héroe, el cual puede ser un agente secreto o un joven en una película de carreras. La cuestión –concluye Alexander- es que éste debe enfrentarse a lo desconocido, confrontar los miedos y volver como un hombre transformado o una mujer segura.
En estos momentos los símbolos ya no son simplemente símbolos, sino procesos simbólicos. Cuando se emplean mitos en estos mundos fantásticos, estos pueden tener múltiples interpretaciones, determinadas por las circunstancias sociopolíticas y observadas de distinta manera según las lentes culturales.