Todas las voces señalan a la piratería como la causa principal de las pérdidas de autores y editores, pero según un informe publicado por la Oficina de Propiedad Intelectual del Reino Unido, los libros electrónicos son los medios digitales que menos se piratean. De acuerdo al estudio, es más preocupante ofrecer libros gratuitos para ganar lectores que la piratería.
Los datos también mostraron que los piratas ocasionales tienden a gastar más que aquellos que no piratean contenido. La gran mayoría de los consumidores, un ochenta y nueve por ciento, adquiere ebooks de forma legal, frente al seis por ciento de usuarios que en algún momento ha pirateado un libro electrónico.
Nate Hoffelder, en un artículo publicado en The Digital Reader añade que la piratería es uno de los problemas menores a los que se enfrentan los autores. Es más, los piratas de libros electrónicos son superados por los freegans, es decir esos lectores de libros electrónicos legales pero gratuitos. El treinta y uno por ciento de los encuestados de este estudio reconoce no haber comprado ni un ebook de los que tiene.
El informe estima que los libros impresos suponen en el Reino Unido un sesenta y cinco por ciento del total de los libros que se consumen en el país. Es decir –señala Hoffelder– el soporte físico en la lectura tiene más adeptos que en otros sectores como la música, el vídeo, las aplicaciones o los juegos.