Una nueva encuesta de Nielsen ha revelado que la cuota de mercado de ebooks y de audiolibros se ha incrementado en 2014 respecto a 2013, a la vez que en el mismo período se ha hundido el porcentaje de ventas de libros en línea a través de minoristas y cadenas de librerías. Esas han sido las principales tendencias halladas en la última encuesta sobre el comportamiento de los consumidores sobre la compra de libros realizada por Nielsen Books & Consumers.

 

Según informa Jim Milliot en Publishers Weekly, en 2014 los libros electrónicos representaron el 15 por ciento del gasto en todos los libros nuevos (títulos del fondo editorial y novedades), frente al 12 por ciento en 2013.

 

Los libros impresos supusieron el 70 por ciento del gasto en libros nuevos en 2014, una caída de siete puntos porcentuales con respecto a 2013 –añade el informe. La merma en la impresión llegó a la edición de bolsillo y tapa dura, mientras que la participación en el gasto de los libros de bolsillo del mercado de masas tuvo un ligero aumento.

 

Los consumidores continuaron gastando más dinero en libros de tapa dura en 2014, con un 32 por ciento del gasto anual en ese formato aunque bajó tres puntos porcentuales respecto al año anterior, seguido de libros en rústica (15 por ciento). Los libros en rústica representaron el mayor número de unidades vendidas, aunque su participación se redujo del 33 por ciento en 2013 a 27 por ciento el año pasado.

 

La categoría audiolibro, liderada por obras digitales descargables, tuvo un año sólido con su participación creciente en el gasto que alcanzó al 3 por ciento en 2014, frente al 1 por ciento del año anterior.

 

El canal minorista en línea, que incluye a Amazon, representó en 2014 el 35 por ciento de todas las ventas de libros nuevos, tanto impresos como digitales, por debajo del 38 por ciento en 2013.

 

Los minoristas en línea en proporción vendieron más unidades, lo que representa el 39 por ciento de las ventas, y refleja el impacto del menor precio de los ebooks.

 

La proporción del gasto en cadenas de librerías –según el estudio– cayó del 25 por ciento en 2013 al 22 por ciento en 2014, y su cuota de unidades el año pasado fue del 21 por ciento.

 

El sector club aumentó su cuota en 2014, con el 10 por ciento del gasto, frente al 5 por ciento en 2015; Audible está considerado un club para los propósitos de la encuesta, y el aumento de las ventas a través de este canal refleja mayores ventas de audio digital.

 

Las ventas a través de otros canales también ganaron cuota significativa en el año, con el gasto que ascendió del 14 por ciento en 2013 al 17 por ciento en 2014. La proporción del gasto en libros nuevos a librerías independientes bajó del 5 al 4 por ciento en 2014, según Nielsen.

 

La encuesta –apunta Publishers Weekly– también encontró que el porcentaje de compradores de libros electrónicos que posee un teléfono Android dio un gran salto en 2014.

 

El 33 por ciento de los compradores ebooks dijo que poseía un teléfono Android en 2014, frente al 9 por ciento en 2013. El iPhone de Apple todavía era el dispositivo de lectura digital que poseía la mayoría de los compradores de libros electrónicos, pero su participación en 2014 se incrementó en sólo dos puntos porcentuales respecto a 2013 (en la encuesta los consumidores podían seleccionar más de un dispositivo).

 

La participación de iPad también aumentó en dos puntos porcentuales en el año mientras disminuyeron los propietarios de ereaders, ya que un 21 por ciento de los compradores de libros electrónicos dijeron que poseía un lector electrónico Kindle, por debajo del 25 por ciento en 2013. El 9 por ciento de los compradores de libros electrónicos declaró tener un dispositivo Nook, por debajo del 12 por ciento en 2013.

 

Los compradores de libros electrónicos también mostraron menor interés por la tableta de Amazon, Kindle Fire, con una caída de un punto porcentual en 2014, al 23 por ciento.