La sexta fase de Territorio eBook –el proyecto de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez sobre la lectura en soportes digitales– ha estado centrada en la investigación sobre la socialización de la lectura y ha ensayado una nueva metodología de dinamización para verificar si Facebook es válida como herramienta de conversación para crear una comunidad de lectores. Como primer resultado, genéricamente se han detectado las limitaciones de Facebook para esta función y se ha comprobado la necesidad de contar con una herramienta específica para la conversación entre lectores.

 

Una vez más los investigadores ponen de manifiesto el impacto positivo de los bibliotecarios sobre la profundidad de la experiencia de la lectura y la motivación para leer. El equipo del CDS que ha liderado este trabajo organizó una presentación de los resultados en Casa del Lector a a todos los colaboradores, con la presencia de los equipos de biblitecarios de distintas localidades de Badajoz.  

 

En ese sentido, la Fundación está desarrollando Lectyo, una plataforma especialmente diseñada para la conversación entre los lectores, que está siendo experimentada por más de trescientas personas entre las que se encuentran editores, libreros, bibliotecarios, docentes y otros lectores y mediadores de la lectura.

 

 

En la sexta fase de Territorio eBook, titulada Nube de lágrimas, la Fundación puso en marcha el primer club de lectura en la nube, una iniciativa en la que también ha participado la Universidad de Salamanca y la Diputación de Badajoz en la que lectores del medio rural han sido los protagonistas de un proyecto orientado a reducir la brecha cultural en territorios periféricos. Esta iniciativa ha apostado también por el trabajo con la empresa startup Chocosoft, que ha estado desarrollando una aplicación para la formación del lector social y la monitorización del proceso de cara al posterior desarrollo de una app de lectura social.

 

El eje de la sexta etapa ha sido la novela Lágrimas en la lluvia, de la escritora Rosa Montero, y el grupo de experimentación ha estado formado por sesenta y cuatro lectores de bibliotecas municipales de la provincia de Badajoz: Azuaga, Cabeza del Buey, Don Benito, Montijo y Siruela de Badajoz y los lectores del Centro de Desarrollo Sociocultural (CDS) de la Fundación de Peñaranda de Bracamonte. 

 

El proyecto ha estado avalado por el trabajo realizado desde finales de 2012 por dos equipos de investigadores de la Universidad de Salamanca, uno dirigido por el profesor José Antonio Cordón, coordinador a su vez del Grupo E-Lectra y que se encarga de la lectura social en los dispositivos y plataformas; y otro, a cargo del profesor Emilio Sánchez, director del Máster de lectura y que está formado por especialistas en comprensión lectora en el Grupo de investigación sobre aprendizaje, instrucción y análisis de la práctica evolutiva.

 

Emilio Sánchez, del Grupo de Investigación sobre Aprendizaje, instrucción y análisis de la práctica evolutiva de la Universidad de Salamanca, destaca que el cometido en la sexta fase de Territorio eBook "era evaluar el impacto que tienen los clubs de lectura en los lectores, es decir la huella que deja en ellos lo que leen". Tras los seis estudios en los que se han ido evaluando distintos tipos de lectores, novelas, o tipos de mediaciones en la dinamización, Sánchez afirma que "considerando globalmente todos los resultados sí que es posible explicar los impactos que se producen y anticipar cuáles se van a producir".

 

En tanto, Ricardo García, integrante del equipo de investigadores dirigido por Emilio Sánchez, subraya que en todos los casos, en los seis estudios de Territorio eBook, aquellos que participan en un club o en una dinamización de la lectura, obtienen mayor placer y mayor disfrute frente aquellos que no lo hacen.

Destaca que esa forma de lectura social puede aportar a distintos niveles, ya sea desde el disfrute, completar la obra, atrapar los elementos de la trama, aprender con el texto, sobre el contexto histórico, o tener más presentes a los personajes. También aclara que todo depende de la interacción entre el lector y la obra aunque señala que la investigación permite decir que "ni los soportes ni los canales parecen decisivos" porque lo importante "es ese equilibrio entre lector y libro y el contenido de la dinamización".