La editorial británica Bloomsbury ha aumentado sus ganancias gracias a la venta de libros electrónicos de sus títulos de mayor éxito. En un comunicado, que ha recogido en parte Paul Biba en Teleread, la empresa manifiesta que está barajando la posibilidad de abrirse al mercado de títulos académicos en un futuro.

Esta editorial, que publicó la saga de Harry Potter, ha hecho público que cuenta con una nueva colección de tres libros de J.K. Rowling relacionados con la saga de Potter, además de con una serie de no-ficción inspirada en espías de la II Guerra Mundial, para así incrementar las ventas el próximo año.

Los beneficios conseguidos por esta editorial, antes de aplicar los impuestos, informa Paul Biba, aumentaron hasta casi los cinco millones de libras (más de seis millones de euros) al cerrar su año fiscal en febrero. Sus márgenes de beneficio operativo antes de los ajustes, según se indica en la fuente consultada, pasaron del 9 por ciento conseguido el año pasado hasta a un 12,4 por ciento.

La cuota de ventas que han aportado los libros electrónicos a la editorial, continúa el especialista, se duplicó hasta el 6 por ciento a partir del año 2011. En el Reino Unido, principal mercado de esta editorial, las ventas de libros electrónicos siguen siendo una parte pequeña de todas las ventas que realiza esta firma en el resto del país: tan sólo un 3 por ciento si se compara con el 23 por ciento de ventas de libros electrónicos en Estados Unidos.

Según augura la editorial en el comunicado aludido, la mayoría de los mercados llegarán al nivel de Estados Unidos en el corto o medio plazo. La utilización de lectores de libros electrónicos se encuentra, según se percibe desde esta empresa, en una fase muy temprana en muchos de los mercados y los dispositivos de lectura nuevos y mejorados –entre los que incluye las tabletas en color y las aplicaciones para móviles– se están comercializando de forma competitiva.