Antes de entrar en detalle, rescatamos dos recientes artículos que enfatizan el valor de estas comunidades en el ámbito escolar y en el trabajo con los jóvenes.
- En el primero, Redes sociales en la escuela, Carolina Velasco expone su opinión sobre la utilización de estos recursos en las aulas. Según ella, acabarán siendo las herramientas más eficaces sobre las que se sustente la educación, pero plantea también que en la actualidad hay una brecha entre profesores y alumnos, que actúa de freno. Así, mientras los alumnos tienen mapas genéticos y estructuras cerebrales en formato “red social”, muchos docentes siguen aferrados, por distintas causas, a los modelos tradicionales, lo que deriva en una crisis profunda.
- El post aparecido en el blog EDUSOTIC titulado: Las redes sociales en el trabajo con jóveneses menos catastrofista y habla a favor de la utilización de estas comunidades virtuales para acercarse a los jóvenes. Defiende que "si queremos llegar a los jóvenes debemos estar donde están los jóvenes", por lo que estas herramientas se configuran como importantes recursos a la hora de educar, realizar dinamizaciones y formación o, simplemente, para dar a conocer asociaciones u otras entidades que trabajan por y para este colectivo.
En cuanto a redes sociales relacionadas con la
literatura, existen muchas y siguen apareciendo nuevas:
Librofilia,
Entrelectores,
Lecturalia,
Bukear,
Qué libro Leo,
Sopa de libros, etcétera. En líneas generales todas son bastante parecidas en cuanto a su planteamiento y funcionamiento. Se trata de comunidades en las que se comparte el amor por los libros, se ofrecen recomendaciones literarias, en ocasiones se pone en contacto a lectores con autores, libreros, bibliotecas y editoriales, se incluyen reseñas y comentarios de cada obra, incluso se ayuda a seleccionar una lectura.
Pero concretamente para jóvenes de entre doce y catorce años, quizá la comunidad virtual más adecuada sea aNobii.
aNobii, palabra coloquial que en inglés quiere decir
ratón de biblioteca o
devoralibros, es una red social construida por y para lectores que permite crear
una estantería virtual propia en la que cada usuario incluye los libros que le interesan, los comparte y al mismo tiempo descubre gente con sus mismos gustos.
Las lecturas pueden clasificarse de distintas formas: estado de la lectura, autores, idiomas, etiquetas o por grupos. La forma de interactuar dentro de esta comunidad puede ser de tres maneras diferentes: a través de un grupo de debate, por ejemplo: vampiros, fans Laura Gallego, libros en español; agregando gente que pueden ser amigos si son conocidos o vecinos si al usuario le gusta una estantería en concreto; y se pueden crear grupos de lectura con foros.
Existe una Wishlist en la que se incluyen los libros que se quieren tener. Además es posible incluir un link de esa lista privada en un blog, de esa manera las personas que visiten el blog podrán tener acceso al listado de libros y a sus referencias.
Por todas estas peculiaridades, además de por contar con un listado interesante de obras que son del gusto de los chicos y chicas de estas edades, es recomendable la utilización de esta red social en el aula.
Entre sus utilidades está la oportunidad que ofrece de crear un club de lectores donde los alumnos consignan los libros que están leyendo, los que ya se han leído, sus comentarios y valoraciones. Parece una forma divertida de fomentar la lectura y de integrar herramientas 2.0 en el aula.
Pero si lo que interesa son las
matemáticas, también hay donde elegir en el vasto mundo de las redes sociales. Por ejemplo,
Sangakooes un sitio web en español creado para aprender conceptos matemáticos aprovechando la cantidad de contenidos incluidos en él. Tiene el propósito de preparar a los estudiantes para el acceso a cursos superiores y plantea distintos niveles de complejidad.
Los usuarios pueden compartir sus problemas de matemáticas con el resto de los miembros de la comunidad, se hacen comentarios, correcciones, y además cuenta con una serie de herramientas que ayudan al estudiante en su proceso de aprendizaje (contenidos, calculadora matemática integrada y un editor de fórmulas Wiris).
Y ¿aprender idiomas? Por supuesto que existen redes sociales para aprender idiomas. Las abordaremos en los próximos días.